Son muchos y muy curiosos los motivos por los que vale la pena visitar Croacia. Se dice que es el centro del mundo, y así es; al menos de forma literal, porque la ciudad de Ludbreg se ubica justo ahí, en el centro del planeta. Es, además, el país de las mil islas, cuenta con 7 lugares declarados Patrimonio de la Humanidad, 8 parques nacionales y 11 parques naturales. Por todo ello, es uno de los destinos más turísticos de Europa Central y el escenario ideal para unas vacaciones inolvidables. Su capital, Zagreb, es uno de los lugares más visitados, al igual que Dubrovnik o los Lagos de Plitvice. Si opta por alquilar un coche en Croacia podrá llegar fácilmente hasta ellos y descubrir por qué.
Pocas ciudades europeas son tan bonitas como Dubrovnik, el símbolo de la nueva Croacia y uno de los destinos más bellos del Mediterráneo. No en vano, se la conoce como “La Perla del Adriático” y su casco antiguo es Patrimonio de la Humanidad. Visite también los monumentos de Split y Togir, y no se pierda la ciudad de Zadar porque desde aquí podrá viajar hasta las Dugi Otok o las Islas Kornati, dos paraísos. Si alquila un coche en Croacia podrá continuar por la costa hasta llegar a Sibenik, cuya Catedral de Santiago también es Patrimonio de la Humanidad, y hasta el Parque Nacional del río Krka, con cascadas de 30 metros de altura. Y en el interior del país le esperan la capital, Zagreb, y los Lagos de Plitvice.
Conducir por un país como Croacia puede ser toda una experiencia que le permitirá disfrutar a su ritmo de espectaculares vistas de la costa. La edad mínima para alquilar un vehículo es de 18 años y el carnet del conductor debe tener una antigüedad mínima de un año. En ciudad, la velocidad máxima permitida es de 60 kilómetros por hora, de 100 en carretera y de 130 en las autopistas. Fuera de las ciudades las gasolineras suelen ser escasas, por lo que le recomendamos llenar el depósito antes de emprender su viaje. Y recuerde que debe llevar encendidas las luces siempre, de día y de noche.