Málaga es uno de los destinos más demandados del sur de España. Visitar la segunda ciudad más poblada de Andalucía es una experiencia cultural, social y gastronómica inolvidable. Y uno uno de los mejores momentos para hacerlo es el mes de febrero. Es el tiempo reservado para el Carnaval, una fiesta de invierno colorida y multicultural para divertirse hasta el extremo antes de que llegue la Cuaresma.
Quienes ya han estado en el Carnaval de Málaga aseguran que, como mínimo, se tiene que vivir una vez en la vida. Este año tienes la ocasión de hacerlo desde el 18 hasta el 26 de febrero. Durante estos días la ciudad se transforma. Los disfraces, el humor y las risas lo inundan todo y la fiesta se vive por todos los sitios, tanto en el centro como en resto de barrios.
El ambiente festivo se nota ya en la semana previa, cuando la gastronomía también tiene un papel muy importante. Berzas, cazuelas, arroces, potajes... Cada barrio organiza su degustación popular, en la que no pueden faltar las coplas carnavaleras en los teatros de Málaga, los lugares más frecuentados en estos días de fiesta. Los grupos de cantos, murgas, comparsas, cuartetos y coros se reúnen en el Teatro Cervantes y participan en un popular concurso de canciones y parodias donde el humor y la ironía siempre son los protagonistas. Muchos de las agrupaciones que participan, que llegan de todas partes de Andalucía, llevan todo el año preparando sus “coplas” y el resultado nunca defrauda. Las risas son interminables.
Este año el Carnaval de Málaga comienza oficialmente el 18 de febrero con el pregón. En esta ocasión el pregonero será Diego Daniel Cortés, un gran conocedor de la fiesta y las coplas. También es el día en el que se celebra el tradicional concurso de disfraces para elegir a los dioses de la fiesta. El Dios Momo y a la Diosa del Carnaval se deciden tras un desfile acompañado de un espectáculo de luces, sonidos y confeti por la plaza de la Constitución y la calle Larios. Los ganadores portarán con orgullo su título de dios y diosa del carnaval hasta el final de la celebración. Al día siguiente, el 19 de febrero, los protagonistas son los niños, con la elección de los príncipes y dioses infantiles.
Y así comienza una semana en la que las calles y teatros de la capital malagueña se llenan de disfraces, fiesta y coplas. Los últimos días se reservan para la elección de Drag Queen y la tradicional Batalla de Flores. Aunque siempre conviene reservar fuerzas para el punto y final del carnaval, que termina las playas de la Malagueta con el entierro del boquerón.
Ya puedes preparar tu disfraz para el Carnaval de Málaga, aunque también te proponemos que lo aproveches en otras ciudades como Cádiz, Sevilla, Carmena o Alcalá de Guadaira. Andalucía es tierra de carnavales y sorpresas. Solo necesitas un coche de alquiler para moverte y ganas de pasarlo bien.
