A orillas del río Pegnitz, en plena Baviera alemana, puede visitar la ciudad donde nació el pintor Alberto Durero. Le hablamos de Núremberg, la que fue la capital medieval de Alemania. Se le conoce, además, por haber sido la sede del famoso proceso contra los dirigentes nazis después del final de la II Guerra Mundial. Sin duda, visitar esta ciudad conlleva recorrer la historia en mayúsculas. Y para llegar, la mejor manera es volar hasta su aeropuerto, el segundo más grande de la región y sede de Air Berlin. Si alquila un coche en el Aeropuerto de Núremberg podrá llegar sin dificultad a la ciudad, ya que sólo siete kilómetros los separan.
Núremberg fue destruida durante la II Guerra Mundial y reconstruida con materiales de la época. Es por eso que muchas de las piedras de sus murallas son negras. Precisamente, la muralla de cinco kilómetros y el foso que rodean el casco antiguo son el escenario de numerosas leyendas medievales. Para rememorar este pasado medieval, le recomendamos alquilar un coche en el Aeropuerto de Núremberg y llegar al castillo, cerca del barrio de San Sebaldo. En la Plaza del Mercado podrá ver la Fuente Bonita y el peculiar carrillón de la iglesia de Nuestra Señora, cuyas figuras tocan las campanas cada mediodía. Y si tiene la suerte de ver el mercadillo navideño, seguro que le parece espectacular.